Si estás leyendo estas lineas, imagino que tienes un libro y quieres autopublicarlo. Puede que todavía lo tengas sin terminar, o que solo sea una idea en tu cabeza, pero el caso es que has oído hablar de la autopublicación y cómo cualquier escritor puede poner a la venta su libro en Amazon o en otras plataformas. Es algo que parece complicado y quieres saber más, porque tu meta es ser un autor publicado; da igual si es solo para que tu familia lea tu obra, para venderla en todo el mundo o —quién sabe—, hasta para ganarte la vida con tus libros. 

Si no es así, me temo que todo lo que vas a leer no te va a servir de nada. En cualquier caso, el saber no ocupa lugar y quizá termine picándote el gusanillo de la autopublicación, así que te invito a que continúes leyendo

Pero si —por los motivos que sean— el tema te interesa, te doy la bienvenida y te invito a que me acompañes en este recorrido por todo lo necesario para autopublicar un libro en pleno 2021. La fecha es importante, no pienses que la cambiaré cada año para que parezca que esta guía esta actualizada. Esto es una fotografía de todo lo que necesitas saber para autopublicar tu libro en este momento; en unos años, todo habrá cambiado y habrá partes de esta guía que todavía tengan vigencia y otras que hayan quedado obsoletas, como es lógico y normal. 

Lo sé por experiencia. En 2014 publiqué en esta misma bitácora una guía de cómo autopublicar tu libro, algo que en aquel momento no existía en ningún lugar de la blogosfera hispana. Leyéndola hoy… tengo que reconocer que hay algunos apartados que han envejecido muy mal, otros que se mantienen bastante bien y algunos que no aparecen porque ni siquiera existían cuando la escribí. Así que como parte de mi regreso a la blogosfera, voy a actualizarla y redactarla de nuevo.

Puede que te preguntes si es necesario. Mi respuesta es que sí. Creo que es muy necesaria una guía que refleje de verdad el complejo mundo de la autopublicación y lo muestre como lo que en realidad es: un mercado y un negocio como cualquier otro, en el que el consumidor elige libremente los productos que quiere consumir.

Tu labor como escritor es crear el mejor producto posible para los lectores, ponerlo a su alcance en un envoltorio atractivo y utilizar las técnicas de marketing que consideres oportunas para darle un empujón. Sustituye producto por historia o libro si la palabra te causa malestar, no te lo tendré en cuenta.  

En esta guía pasaré muy por encima por el primer paso de ese recorrido. Creo que la mejor forma de que un escritor aprenda a crear buenas historias es leyendo, estudiando y, sobre todo, escribiendo. Al igual que con cualquier otro arte, la práctica hace al maestro, por lo que todo lo que escribes sirve, aunque luego termines desechándolo. Sin embargo, el factor que diferencia a los escritores de los aficionados es el hecho de que los escritores terminan sus obras. Y si tienes obras inacabadas en un cajón, ya sabes a qué me refiero. 

El segundo paso del recorrido será el que ocupe la mayor parte de esta guía, donde examinaremos aspectos como las portadas, la maquetación tanto de libro físico como libro electrónico, o la sinopsis, por citar los tres más importantes. Pero también hablaremos de un aspecto primordial, que ninguna guía publicada en la actualidad trata como se merece y que es clave para que el lector decida adquirir tu libro: el precio. Y si crees que estoy exagerando, lamento decirte que vas por mal camino en este mundillo. Marcar bien los precios de tus libros puede ser la diferencia entre ganar dinero de verdad o solo sacarte unos eurillos para irte a cenar de vez en cuando. 

Del tercer paso del recorrido hablaremos también, aunque no tanto como del envoltorio. La razón primordial es que el mundo del marketing es fugaz, y cada día surgen nuevas técnicas y plataformas en las que enfocar tus esfuerzos. Sin embargo, debes decidir con mucho cuidado dónde inviertes tus seguramente escasos recursos. Porque has de tener algo muy claro: ninguna inversión en publicidad te garantiza ventas, especialmente si lo haces a lo loco. Pero los hechos son tozudos, y hay escritores que ganan miles de euros con sus anuncios en Facebook y Amazon. Hablaremos de por qué es así y cómo puedes intentar replicar su éxito. 

Porque no dudes que hay escritores autopublicados que han logrado el éxito, y hay otros que además viven de los libros que escriben.  Y es que ambos resultados no tienen porque ir juntos de la mano, ya que el éxito es relativo. Por eso la primera pregunta que debes hacerte es ¿qué consideras éxito? No es una pregunta baladí. De hecho, es el primer paso que debes dar si quieres tomarte esto en serio. ¿Qué es el éxito para ti, cuáles son tus objetivos con la escritura? ¿Buscas dinero, fama, reconocimiento, o algo completamente distinto? 

Solo tú sabes la respuesta a esa pregunta. En cualquier caso, y sea cual sea tu respuesta, te puedo asegurar que la autopublicación es el camino para conseguir tus objetivos. Y es que ya ni siquiera podemos hablar de que las editoriales repudian a escritores autopublicados, al contrario. Tener éxito autopublicándote puede abrirte las puertas del mundo editorial tradicional, si ese es tu objetivo. Fíjate si es así que la ganadora del premio Planeta 2020 empezó autopublicando, y con eso digo todo. 

Tú puedes lograrlo también, y con esta guía quiero ayudarte a conseguirlo. Porque lo más importante que consigues cuando autopublicas es la libertad. Tienes completa libertad para escribir lo que quieras, para elegir o crear tu portada y el resto de elementos que componen el envoltorio de tu libro, y para publicarlo en cualquiera de las múltiples plataformas que existen, poniendo el precio que consideres más adecuado. Y si algo falla, no pasa nada; tienes total libertad para corregirlo, sacar nuevas ediciones, cambiar portadas, reescribir tu libro y publicarlo de nuevo… lo que te dé la gana, en suma.

Pero la libertad implica sus riesgos, y es que es muy fácil equivocarse. Cuando eso ocurra —porque ocurrirá, no lo dudes—, respira hondo, cuenta hasta diez si lo necesitas, corríge tu fallo y continúa. No hay nada que pueda pararte, excepto tú.

Te espero el próximo lunes. Mientras tanto, ten mucho cuidado ahí fuera