Se hace difícil retomar esta bitácora después de tanto tiempo. Han pasado muchas cosas desde que dejé de escribir aquí hace algo más de mes y medio. Lo que pensé era una forma de liberar energía creativa para invertirla en otros cometidos era, en realidad, un síntoma de colapso. Un colapso que llegó sin hacer ruido y que me ha mantenido lejos de la pantalla y lejos de la escritura durante estas semanas.
No tiene sentido ponerme aqui a hablar de lo que me ha pasado. Mis circunstancias personales seguirán siendo personales. Lo que ocurre en mi trabajo alimenticio se queda allí. Es la suma de todas esas cosas la que ha desencadenado la situación, a lo que hay que sumar la Resistencia generada al escribir La Guerra del Ayer, que es mi novela más importante hasta la fecha.
Esto último no es retórica vacía. Este libro supone el cierre de una historia iniciada hace cuatro años, y todas las dudas y miedos que aparecen en cualquier novela aquí surgen multiplicadas. No puedo compararme con él, pero ahora entiendo lo que está pasando George R.R. Martin. La situación es la misma, al fin y al cabo.
Pero basta ya de introspección. Ya he perdido suficiente tiempo por este año y esta vida. Tengo una novela que escribir, una web que arreglar, y muchas cosas que contar. Ahora, a escribir.
¡Feliz escritura!
Imagen: Glenn Carstens-Peters en Unsplash
Saludos. Adelante con la novela. Os sigo en el podcast de «Charlas de autopublicación» con Alberto y Jaime.
Siempre es un placer saber de alguien que nos escucha 🙂 ¡Muchas gracias por los ánimos, Paco, y un abrazo muy fuerte!
Mucho ánimo, Miguel Ángel y un abrazo fortísimo.
Muchas gracias, Ana. ¡Otro abrazo igual de fuerte para ti!
Buenas, descubrí tu blog hace poco, y ahora estoy pendiente de tus publicaciones.
Un saludo
¡Muchas gracias, Noé! Espero que te guste lo que escriba por aquí, aunque aparezca menos frecuentemente que antes. ¡Un saludo!
Hola, Miguel Ángel. ¡Mucho ánimo para retomar la escritura! Nunca he tenido un proyecto narrativo tan largo como uno de cuatro años, pero sí que me puedo hacer a la idea de lo que se debe sentir al terminar algo en lo que has invertido tal cantidad de tiempo.
De otro post tuyo que he leído, me he interesado por Dean Weasly Smith. 🙂
¡Un saludo!
Muchas gracias por tus ánimos, Álvaro. Cuesta retomar la rutina, pero ya lo voy logrando poco a poco y pronto volveré a la rutina también en el blog, que lo tengo un poco demasiado abandonado. Espero que aprendas mucho de Dean, yo lo hice 😉 ¡Un saludo!
¡Mucho ánimo Miguel Ángel! Los proyectos largos siempre suelen atascarse en algún momento, es normal, no te desanimes. Somos muchos los que te seguimos a través de tus magníficos libros y de vuestro no menos magnífico podcast. No te sientas presionado por nada del mundo, Tus lectores somos gente paciente, ya que muchos nos dedicamos a escribir alguna que otra cosa, y por lo tanto nos podemos poner en tu lugar.
Un saludo muy fuerte.
¡Muchas gracias Francisco! Lo cierto es que de todo esto estoy aprendiendo mucho, más incluso de lo que me gustaría, y como lo que no te mata te hace más fuerte, de este bajón solo puedo salir siendo mejor que cuando entré 🙂 Gracias de verdad por tus palabras de ánimo y ten por seguro que lo que me motiva para seguir adelante es no defraudar a lo mejor que tengo como escritor, que son mis lectores. ¡Un abrazo!