Este mundo de la literatura independiente en el que nos movemos sigue siendo relativamente nuevo. El Kindle tiene apenas diez años. En España Amazon llegó hace solo siete. y así con todo.
En el antiguo mundo de la publicación todo se basaba en la velocidad. Vender muchos ejemplares muy rápido para salir en las listas de venta y lograr visibilidad. Si hay que hacer tiradas desmesuradas se hacen, lo importante es colocar los libros.
Hoy, la velocidad ya no importa. No existen libros antiguos ni nuevos, lo que los yanquis llaman frontlist o backlist. Un libro es nuevo para el lector que lo encuentra por primera vez, aunque se haya publicado hace años.
Antes, un libro que se no vendía se descatalogaba y desaparecía para siempre. Hoy, un libro nunca está descatalogado o, mejor dicho, solo lo está si así lo quiere su autor.
Aunque venda pocos ejemplares, cualquier libro puede recibir una nueva vida gracias a una nueva cubierta, o un impulso en ventas al pertenecer a un género que se pone de moda. El éxito puede llegar cuando menos lo esperas, solo tienes que estar preparado.
Todas estas son características de este apasionante nuevo mundo, y lo mejor es que vamos a vivir el resto de nuestra vida en él.
Mañana, más. ¡Feliz escritura!
Imagen: Félix Lam en Unsplash