Acabo de terminar la tercera reunión creativa de La Guerra del Ayer, en la que he puesto motivo y motivación a la trama en la que solucionaré el cabo suelto de Proyecto Armagedón. Y como suele ocurrir, casi me da miedo ver lo bien que encajan las cosas, porque el final de esa trama y ese personaje es un reflejo del final de otra trama y otro personaje. Casi parece justicia poética, de hecho.
Así que mi reflexión del día que te quiero compartir es la siguiente: aunque parezca que en tu historia hay un nudo gordiano imposible de deshacer, siempre hay una forma. Para conseguirlo, lo único que tienes que hacer es trabajar como una hormiguita para sacar a la luz la historia. Porque tu historia ya existe en algún lugar del inmenso reino de la imaginación, y tu labor como escritor no es tanto crearla como descubrirla.
Voy a seguir descubriendo mi historia. Mañana, más.
¡Feliz escritura!
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Jueves 7 de septiembre de 2017
Días seguidos publicando en el blog: 46
Días seguidos escribiendo ficción: 0. Mejor racha: 3
Días seguidos por encima de mil palabras: 0. Mejor racha: 3
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Ja, ja, acabas de inventar la Teoría del Multiverso [Creativo] Nivel 1. Quita lo del Creativo y es una teoría cosmológica actual.
Ahora en serio, ¿has leído «El Número de la Bestia», de Tito Heinlein (y las secuelas?
Enhorabuena por haber encontrado solución a tu nudo gordiano, que sé fehacientemente que es muuuuuy gordiano, je je. Como te conozco bien, seguro que no has usado la espada de Damocles, y no has usado la socorrida solución de sacar de la manga la pistola de rayos petamegagigaheterodinos para matar al malo.
Deseando que la escribas.
¡Hola, Rafa! La duda ofende, claro que he leído al Tito Heinlein, o al menos creo que he leído prácticamente todo lo que está publicado en español (y algo de lo que está en inglés también), pero no lo había asociado con su multiverso. Y no he usado ni espada ni pistola de rayos ni fuerza bruta, de verdad. La solución se presentó sola, y solo tuve que dejar que la historia siguiera su desarrollo lógico.
Deseando que la leas, a ver qué te parece (en unos meses hablamos 😉 ). ¡Un abrazo!