Todos los escritores independientes deberíamos estudiar los métodos de aquellos que tienen éxito, para intentar comprender cómo lo han hecho.

No existe ninguna vergüenza en copiar, no hay que inventar la rueda con cada nuevo libro. Al fin y al cabo, la diferencia está en la ejecución.

Eso sí, el marketing de tu libro es otra cosa muy distinta, en la que la ejecución no te garantiza nada, y tampoco lo hace copiar lo mismo que hacen otros con éxito.

Lo que funciona una vez, no tiene necesariamente que funcionar siempre. Disponte a probar varias tácticas y a fracasar en varias de ellas.

Si eres el escritor número 1000 en probar una táctica de marketing, no puedes esperar obtener los mismos resultados que obtuvo el primero que la probó.

Puedes ponerte en una larga fila junto a todos los que hacen lo mismo que tú, o puedes saltarte la fila haciendo cosas que nadie más hace. La elección es tuya. 

Mañana, más. ¡Feliz escritura!

Imagen: Paul Dufour en Unsplash