Esto de escribir va de palabras. Puede que no sean las palabras de amor que cantaba Queen, pero sí es el amor por las palabras.

Sin embargo, el amor por sí solo no hace nada. Tienes que trabajar para escribirlas.

Sin embargo, no se trata de palabras escritas. Se trata de palabras terminadas.

Si yo contara en mis balances mensuales todas las palabras que escribo cada día, te aseguro que las cifras serían mucho mayores. No lo son porque solo cuento las palabras terminadas.

Esas palabras terminadas son las que están listas para publicar. Si puedes escribir 500 palabras terminadas cada día, vas muy por delante de alguien que escribe 3.000 palabras diarias y luego tiene que revisarlas y editarlas.

Siempre es mejor escribir que no escribir, eso está claro. Pero si escribes palabras terminadas, te irá mucho mejor que si solo te fijas en la cuenta final.

Como mínimo, estarás más cerca de terminar la historia que estás escribiendo. Y cuando la termines, el proceso comienza de nuevo.

Ahora que lo pienso, sí que son palabras de amor, ¿no crees? O al menos la excusa para escuchar a Queen. Como si hiciera falta alguna.

Mañana, más. ¡Feliz escritura!

Imagen: Jon Tyson en Unsplash