Puedo conseguirlo.

Puedo vivir de lo que escribo, siempre que escriba.

Navegar por internet no es escribir. Leer sobre escribir no es escribir. Escribe.

Puedo conseguirlo.

No necesito millones de lectores. Solo necesito uno más que ayer.

Mi camino no es el de otros escritores. Es mi propio camino y yo decido cómo caminarlo y qué sendero tomaré.

Puedo conseguirlo.

Confío en mi proceso, porque me ha traído hasta aquí y me llevará hasta el final.

Aunque las dudas, el miedo y la Resistencia me ataquen cada día.

Puedo conseguirlo.

El esfuerzo es binario. O lo haces o no lo haces. Uno o cero.

No estoy haciendo sacrificios, estoy desechando las partes de mi vida que me lastran en mi propósito.

Puedo conseguirlo.

Cada día debo luchar por ser todo lo que puedo ser. Ser menos sería engañar a quienes creen en mí.

Tengo un plan. Tengo la determinación. Tengo pruebas de que funciona.

Puedo conseguirlo.

Jamás terminaré de saber todo lo que necesito saber. Solo puedo seguir aprendiendo. Con humildad.

Ayudar a otros no me disminuye, al contrario. Pero no dejaré que nadie se aproveche. Mi propósito va primero.

Puedo conseguirlo.

La constancia y el esfuerzo ganan al talento. Siempre. Los que dicen lo contrario no tienen ninguno de los tres.

Solo me preocupo de lo que puedo controlar. No puedo tener más talento, pero sí más constancia y más esfuerzo.

Puedo conseguirlo.

Y lo conseguiré.

 

Imagen: Joshua Hibbert vía Unsplash