Después de la entrada de la semana pasada, me quedé con las ganas de hablar más de los planes de negocio para escritores independientes y cómo redactar uno. Seamos realistas, tener un plan de negocio o no tenerlo no te hace mejor o peor escritor, pero es útil para plantear tus objetivos y definir tus estrategias para tu carrera. Ya solo por eso, vale la pena que te plantees uno.

En mi caso, desde que empecé con esta aventura hace casi cuatro años siempre he tenido planes de negocio. Lo que pasa es que eran notas manuscritas en una libreta y nunca se me habría ocurrido llamarlas plan de negocio. Cuatro años después, algo he aprendido y me apetece compartirlo, así que voy a explicarte cómo elaborar un plan de negocio como escritor independiente.

Para aquellos que lean esta entrada que conozcan cómo se elabora de verdad un plan de negocio de verdad, que no se rasguen las vestiduras. Como gremio, los escritores independientes somos un poquito especiales, por lo que no podemos acogernos a un plan de negocio estándar.

Este modelo de plan de negocio que propongo consta de cinco grandes apartados.

1.- Definición, metas y objetivos.

2.- Análisis del entorno.

3.- Estrategias y acciones.

4.- Finanzas.

5.- Equipo.

Voy a examinar cada uno de estos epígrafes, poniendo mi propio caso como ejemplo. En otras palabras, te voy a revelar mi plan de negocio, ya no que tengo miedo de que me vayas a copiar. No ganarías nada haciéndolo, al fin y al cabo.

1.- Definición, metas y objetivos

En este apartado tienes que establecer de manera clara e inequívoca quién eres y cuáles son tus metas y objetivos. Puede parecerte tonto, pero si no lo defines desde un principio, es muy fácil que vayas dando tumbos de un lado a otro, por la sencilla razón de que no sabes lo que quieres.

Por tanto, el primer punto es la definición. Esta sería la mía:

Soy Miguel Ángel Alonso Pulido, escritor de ficción. 

Con esas palabras, ya dejo claro a lo que me dedico. Digo que escribo ficción y no ciencia ficción, porque no quiero limitarme. Aunque hasta ahora solo haya escrito CF, quiero tocar más palos en el futuro y no quiero limitarme. También es importante la limitación; digo que escribo ficción, no que enseño a escribir o que venda nada que no sean mis libros. Esa simple definición ya me evita cualquier duda ante posibles ofertas para crear cursos o impartir clases magistrales. No soy profesor, soy escritor.

Tu definición puede ser tan sencilla como la mía o mucho más elaborada. Lo importante es que no te engañes a la hora de definirte, porque esa definición es la base de todo tu plan de negocio y toda tu carrera, un edificio que solo puede sostenerse si tiene cimientos sólidos y ciertos.

A continuación, tienes que establecer cuáles son tus metas y cuáles son tus objetivos como escritor o escritora independiente. Yo juego con ventaja en este apartado, ya que hablé de él a principios de este año. Te remito a esa entrada para las explicaciones pertinentes, aquí me voy a limitar a listar mis metas:

  • Escribir las mejores historias que sea capaz de crear, terminarlas y publicarlas.
  • Compartir con sinceridad el estado de mi carrera y lo que aprenda de este oficio.

Mis metas no han cambiado y siguen siendo las mismas. De hecho, la segunda de las metas se ha potenciado bastante desde que empecé a escribir todos los días, así que voy a actualizar mi definición:

Soy Miguel Ángel Alonso Pulido, escritor de ficción y bloguero. 

¿Para qué decir otra cosa, verdad? Puede que mi bitácora no tenga miles de visitas diarias o decenas de comentarios, pero tiene su núcleo de lectores fieles y me da muchas alegrías. Y tras más de 11 años escribiendo en todo tipo de blogs personales, es de justicia reconocerlo.

Después de establecer mi definición y mis metas, queda fijar mis objetivos. Al principio de mi carrera, repetía siempre que mi objetivo era vivir de lo que escribo y sigo manteniéndolo, pero creo que es demasiado general. Por eso, para este plan de negocio, voy a fijar un objetivo concreto.

Antes de 2023, habré ganado más de mil euros al mes, durante un mínimo de seis meses seguidos. 

La frase anterior recoge todas las características que debe tener un buen objetivo: es concreta, es realizable (más sobre eso en el siguiente apartado) y es fácilmente medible. Lo conseguiré o no lo conseguiré, no hay términos medios.

Ahora, te animo a que antes de seguir leyendo, cojas papel y boli y escribas tu definición, tus metas y tus objetivos. Yo te espero.

¿Ya terminaste? Entonces sigamos.

2.- Análisis del entorno

En este apartado tienes que estudiar tu entorno para saber cómo se comporta el mercado en el que vas a situar tu producto, en este caso, publicar tus libros. Este análisis incluye, pero no está limitado a, los siguientes puntos:

  • Conocer el comportamiento del mercado del libro electrónico (plataformas disponibles, prácticas habituales, sistema de royalties, etc.).
  • Conocer el comportamiento del mercado del libro de papel (funcionamiento de editoriales tradicionales, contratos y cuestiones legales, royalties, distribución, etc.).
  • Conocer el proceso de autopublicación de un libro (diseño de portadas, escritura de sinopsis, maquetación de libro electrónico, publicación de libro electrónico, maquetación de libro en papel, publicación de libro en papel, etc.).
  • Economía básica (estrategia de precios para tus libros, saber en qué punto un libro te genera beneficios, saber cuando invertir en la producción de tu libro, saber cuando invertir en marketing, etc.).
  • Conocer el estado de tu género (saber los libros que se venden, tendencias y preferencias de los lectores).
  • Conocer el estado de tu profesión (saber qué escritores independientes están vendiendo y logrando sus objetivos, y estudiar cómo lo hacen)

Cuanto más conozcas de tu entorno, más precisa será la radiografía que puedes realizar del mismo, y más información tendrás para decidir tus estrategias y tus acciones. En mi caso, no voy a poner aquí todo lo que he venido estudiando de mi entorno durante estos cuatro años, por limitaciones obvias de espacio. Mucho de ello está contenido en las casi cuatrocientas entradas que llevo escritas.

Así que ya sabes, toma la hoja que escribiste antes y anota todas las cosas que sabes de tu entorno y que puedan serte útiles para tu carrera como escritor independiente.

¿Ya terminaste? Muy bien, sigamos.

3.- Estrategias y acciones

Aquí es donde tienes que establecer estrategias y acciones. Las estrategias son las directrices generales que te llevan hacia tus metas y tus objetivos, y las acciones son las tareas específicas que realizas para el mismo fin. Las estrategias son generales y las acciones, concretas y la suma de las dos te llevará a tu meta.

De nuevo te remito a esta entrada en la que hablé de mis estrategias, aquí me limitaré a ponerlas por escrito.

  • Aprenderé constantemente sobre el arte de contar historias.
  • Desarrollaré y mejoraré mi oficio de escritor.
  • Adoptaré una ética de trabajo sólida y profesional.

Lo que no escribí entonces y voy a añadir ahora son las acciones que voy a llevar a cabo para alcanzar mis metas y objetivos. En mi caso, después de todo el tiempo que llevo escribiendo en esta bitácora todos los días, he decidido aplicar esa misma táctica a la escritura de ficción. Así, la acción que voy a tomar para cumplir estrategias y objetivos es simple y sencilla: escribir todos los días. Y como este plan es a cinco años, cada año escribiré más que el anterior.

  • Diciembre de 2017 y 2018: 500 palabras al día.
  • 2019: 600 palabras al día. 
  • 2020: 700 palabras al día.
  • 2021: 800 palabras al día. 
  • 2022: 900 palabras al día. 

Con esos niveles de producción, debería poder publicar dos títulos en 2018 y cuatro en 2019. No he querido avanzar al resto de años para no caer en el cuento de la lechera, pero las matemáticas no mienten. Cumpliendo con esa producción, tengo una respetable cantidad de palabras anuales escritas que se pueden traducir en varios títulos cada año.

Para llevar un control de ello, estoy usando las mismas técnicas que utilizo para escribir todos los días en esta bitácora: escribir con anticipación, llevar un control de lo que necesito escribir cada día, y tener siempre presente y a mano el calendario con lo que tengo que hacer.

Ahora ya sabes qué toca. Ve a por tu plan de negocio y escribe las estrategias y acciones que vas a realizar. Yo te espero.

¿Listo? Entonces podemos continuar.

4.- Finanzas

En este apartado es donde debes apuntar todos tus gastos e ingresos, para poder tener bien clarito si estás en números rojos o negros en tu carrera. Creo que ya lo dije en alguna ocasión, pero un buen truco para controlar las finanzas de tu carrera de escritor es abrirte una cuenta bancaria aparte para usarla en todo lo que necesites en tu carrera.

Yo lo hice así desde 2014 y ha sido muy práctico. Gracias a los ingresos de mis libros, pago los gastos de web y hostings de todas mis webs, pago el Patreon de dos mis autores de cabecera y he comprado todo tipo de herramientas informáticas, como Trackerbox. Ah, y se me olvidaba lo más importante: todos los libros que compro para mi Kindle se pagan de esa cuenta.

En este apartado, no te olvides de anotar esos gastos fijos que se te van a generar con cada nuevo libro: el coste de la imagen de tu portada, el ISBN si vas a comprar uno, la partida de marketing si vas a crearla, etc. Otros gastos fijos pueden ser el dominio y hosting de tu web, o incluso tu suscripción a Kindle Unlimited (leer es vital para un escritor, ya lo sabes).

No te preocupes de si primeras no se te ocurre cómo llenar este apartado. Por eso hacía hincapié en el análisis del entorno, para que vieses todos los posibles gastos en los que puedes incurrir y puedas decidir con conocimiento de causa si los incluyes o no en tu plan de negocio.

En cualquier caso, toma tu plan de negocio y ponte a llenar el apartado de finanzas. Yo te espero.

¿Listo? Ya casi terminamos.

5.- Equipo

Como escritor independiente, puede que tengas tendencia a hacerlo todo tú mismo. Yo lo hago, pero soy consciente de que solo podré hasta cierto punto. En cuanto tu carrera despegue, dejará de ser el show de una sola persona y empezarás a necesitar un equipo.

  • Alguien encargado de portadas.
  • Alguien encargado de corrección.
  • Alguien encargado de la sinopsis.
  • Alguien encargado de la creación del libro electrónico y subirlo a las diferentes tiendas. 
  • Alguien encargado de la creación del libro en papel y que lo suba a las distintas plataformas. 
  • Alguien que se ocupe del marketing, redes sociales y tu web.

La lista puede ser interminable, pues para cada tarea que no sea escribir tu libro, puedes necesitar que alguien lo haga por ti. Cuando puedas permitírtelo, claro está, pero si triunfas, llegará el momento que puedas.

Así que sé consciente de ello y cuando analices el entorno, ten un ojo puesto en encontrar profesionales que puedan ayudarte. Y no te olvides de tener en cuenta el dinero que les pagues en el apartado de finanzas.

Puedes ir y terminar de anotar cosas en tu plan de negocio, te espero.

¿Ya está? Perfecto, porque con todo lo que hemos visto en esta entrada, deberías tener como mínimo un par de hojas llenas de anotaciones más o menos desordenadas. Puedes pasarlas en limpio al ordenador o mantenerlo así, el caso es que ya tienes un plan de negocio que te servirá para alcanzar tus metas. 

Desde luego, yo te iré contando cómo consigo las mías. 😉

Mañana, más. ¡Feliz escritura!

Imagen: Helloquence en Unsplash