Para este negocio y para cualquier otro, necesitas estudiar si quieres avanzar.

Nadie nace sabiendo, y en el mundo de la escritura independiente, menos todavía. Parte de tu trabajo como escritor es estudiar. 

Estudiar el arte y ciencia de contar historias.

Estudiar el lenguaje y cómo funciona.

Estudiar el mundo de la autopublicación y todos sus procedimientos.

Estudiar el mundo de la edición y cada paso del proceso de creación de un libro.

Si no te gusta estudiar tu negocio, entonces jamás llegarás a entenderlo y mucho menos te apasionarás por él.

Lo que es peor, si mientras leías las líneas anteriores sacudías la cabeza y pensabas que todo eso no vale para nada, entonces tienes un serio problema.

Mañana, más. ¡Feliz escritura!

Imagen: Jazmin Quaynor en Unsplash