Si estás leyendo estás líneas es que sigo vivo.
No, no me ha pasado nada malo ni he tenido ninguna enfermedad mortal (más allá de un maldito resfriado que no se me quiere despegar). Es solo que he hecho el cambio de servidor de esta página y ayer estuve liado con la migración de la web.
Hay cosas que faltan, y no descarto que para cuando leas esto haya cambiado incluso el tema de WordPress, pero lo importante es que el cambio ha sido para bien, y es un avance de lo que va a ser este año 2018.
No me gusta hablar del backstage técnico de esta bitácora. Primero porque no soy técnico y estoy seguro de que cualquiera con más conocimientos de wordpress me corregiría la forma de hacer lo que hago, y segundo porque dudo que interese a nadie. Así que más allá de anunciar que he cambiado de servidor de hosting no me leerás nada más. Con el tiempo, esta web volverá a ser lo que era, no lo dudes.
Eso sí, todo paso a paso. Se han perdido algunos comentarios y algunas entradas que he tenido que recuperar de mis archivos. También tengo que restaurar los enlaces para comprar los libros gracias al plugin contemplate y seguro que me dejo algo en el tintero, pero con eso ya es más que suficiente.
Tenía mucho más preparado para contarte: que si quiero replantearme cómo gestionar la lista de avisos o los proyectos que tengo previstos para este año. Sin embargo, el cambio y todo lo que he tenido que corregir se ha llevado toda mi energía. Por eso, mejor te emplazo al jueves para que conozcas mi proyecto de Cinco relatos en marzo. ¿Cómo, no lo conoces? El jueves te lo cuento todo, esto es solo un teaser.
Mañana, más. ¡Feliz escritura!
Imagen: Patrick Fore en Unsplash